Diez consejos para hornear correctamente
Sé que lo sabéis de memoria pero a mi cocina se acercan muchos lectores haciendo sus primeros pinitos, y para ellos es esta entrada: diez consejos para hornear correctamente en el horno de vuestra casa.
1. Primero, tener un horno bueno, claro. Esta obviedad no es tal cuando muchas veces alquilamos o compramos una casa que viene con el horno ya instalado, como fue en mi caso, y sufrí todo lo indecible. A pesar de que por aquel entonces no hacía tantas cosas como ahora —eramos sólo dos y no existía webos— sí las hacía de manera similar y los resultados eran francamente regulares.
Cuando digo un horno bueno, no quiero decir supermegahiperpiroturbolítico, con función vapor y mil programas predefinidos, que todo eso está muy bien, sino que me refiero a un horno que hornee a la temperatura más parecida a lo que dice, y por lo menos que reparta bien el calor, en la función arriba y abajo, que es la básica.
2. Sí es importante conocer a tu horno, y para intimar no queda más remedio que usarlo y usarlo en un montón de recetas diferentes. Debemos saber cómo se limpia, y trabajar con él de una manera segura.
3. Para hornear carne de ternera el tiempo estimado es de 25 minutos por cada kilo de carne, y la temperatura ideal son 200º durante los primeros 20 minutos para luego bajarlo a 170º, todo ello referido a cocción tradicional y en horno eléctrico.
4. Para hornear pollo el tiempo estimado son 30 minutos por cada kilo de carne, y empezar a hornear a 230º durante la primera media hora y posteriormente bajarla a 180º.
5. Para el cerdo son 30 minutos por kilo, con el horno a 200º durante 20 minutos, para luego bajarlo a 170º.
6. Para cocer piezas de carne es conveniente rociar el jugo de la cocción por encima y también es importante tener en cuenta el reposo fuera del horno, ya que el calor residual contará para que se haga un poco más.
7. El tiempo y la temperatura del horneado del pescado dependen del peso y del tipo de pescado. En muchas ocasiones se usa la función aire para hornearlos, ya que se hacen rápido y quedan jugosos. Pero tendréis que probar qué os funciona mejor. El pescado está en su punto cuando la carne pegada a la espina se despegue fácilmente. En cuanto a los tiempos, calcula unos 20 minutos para el primer kilo y 10 minutos más por cada kilo de más que pese la pieza elegida, contando que tendremos el horno a una temperatura de 190º o 200º.
8. Normalmente se mete el alimento con el horno precalentado a la temperatura que indique la receta. En mis recetas, si no realizo aviso al respecto, se mantiene la temperatura de horneado que hemos puesto para precalentarlo. Si hay que bajarla aviso siempre.
9. Para repostería es conveniente seguir las indicaciones de la receta. El horneado de bizcochos merece una entrada específica para hablar de ello. Es fundamental tener nuestra propia experiencia personal para conseguir resultados buenos. Yo no uso nunca función aire para repostería, y en muchos sitios lo aconsejan y sé que a muchos de vosotros os gusta más, por eso es necesario que practiquéis y elijáis. Especial atención merecen para hornear las magdalenas y los merengues. Sobre estos últimos tengo pendiente escribir.
10. Si eres panadero casero y tu horno es viejo, probablemente dejará de existir en unos meses. El pan requiere un precalentamiento a una temperatura muy alta —250º— que pocos hornos ya con unos años llegan a resistir con un uso continuado. Mis mejores resultados en pan los he logrado desde que tengo mi horno hace año y medio, que admite un precalentamiento muy alto y se porta como un machote para la caña que le doy.
No me gusta hornear ni dos alimentos a la vez, ni el mismo alimento en dos bandejas. No consigo resultados razonables ni aunque ponga el aire para que se reparta por todo igual -igual es que soy muy exagerada-. Por eso hay que espabilar conociendo cada uno su horno a base de prueba-error.
Mi horno es éste estoy muy contenta con él. He tenido Balay, Fagor y también me fueron bien. Ahora casi todas las marcas tienen buenos hornos de gama media con precios competitivos, sin que sea necesario para pagarlos rehipotecar la casa.
Su