Crema de calabacín y guisantes
¿Qué tiene de especial esta crema de calabacín y guisantes tan corriente? Pues nada, que en mi casa es un fijo semanal, y quiero ir poniendo estas recetas básicas poco a poco. No quiero que se me olvide que el fin último de este blog es que mis mozas tengan un recetario de las comidas de casa, y entre las muchas que faltan, ésta es una de ellas.
¿Qué contarte de las cremas que no sepas? Son de estupenda digestión, más versátiles imposible, aptas para todos los de casa, de muy buen calentar de un día para otro, y que muchas veces admiten resumen nevera de verduras. Al final de esta entrada te doy unas claves para que te salgan más que bien.
¡A ello!
Receta crema de calabacín y guisantes
Ingredientes para 6 personas
1 k de calabacines
250 g de guisantes congelados —frescos ya sería un lujerío; lo dejamos para cuando sea la temporada—
La parte verde de un puerro
½ cebolla
1 zanahoria pequeña
1 patata pequeña
5 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra
Sal
Agua para la cocción
Para adornar
Berberechos naturales
Unos picatostes —pan frito en pequeños dados—
Unas gotas de aceite de oliva virgen extra
Preparación
Tradicional
3. Cuando pasen un par de minutos, añadir el calabacín lavado y troceado —pero no pelado—, y desechando los extremos, los guisantes, la patata y la zanahoria, también peladas y troceadas, y un poco de sal. Darle vueltas un par de minutos.
5. Cerrar la olla y, una vez que suba la válvula, mantenerla de 10 a 15 minutos. Depende de la marca de la olla.
6. Retirar del fuego y, cuando haya bajado la válvula, quitar la tapa. Retirar un poco de agua y reservar. Es preferible quedarnos cortos y añadirla al final, que hacer un aguachirli desde el principio.
8. Tener los berberechos un buen rato en agua fresca con sal. Abrirlos poniéndolos en un poco de agua hirviendo durante unos 15 segundos. Quitar conchas e insertarlos en una brocheta.
10. Servir la crema. Añadir unas gotas de aceite de oliva virgen extra, el pan frito, y la brocheta de berberechos.
Thermomix
3. Añadir el calabacín lavado y troceado —pero no pelado—, y desechando los extremos, los guisantes, la patata y la zanahoria, también peladas y troceadas, y un poco de sal. Programar 5 minutos, a temperatura Varoma y velocidad 2.
4. Añadir dos vasos y medio de agua.
6. Poner velocidad progresiva 5-7-9 durante 20 segundos.
7. Añadir las otras tres cucharadas de aceite de oliva virgen extra restantes. Poner unos 15 segundos a velocidad progresiva 5-7-9. Probar. Rectificar de sal, y si queda muy espesa, añadir un poco de agua de la cocción. Opcionalmente le podeis añadir unas gotas de limón o vinagre, que no le da sabor pero acentúa el propio de la crema.
9. Freír en abundante aceite de oliva virgen extra unos dados de pan. Ponerlos a escurrir en papel de cocina.
10. Servir la crema. Añadir unas gotas de aceite de oliva virgen extra, el pan frito, y la brocheta de berberechos.
Consejos y preguntas
- ¿Es necesario rehogar los ingredientes? ¿No se puede echar todo a cocer sin más?
No tiene nada que ver el sabor que le da rehogarlo un poco antes de ponerlos a cocer. Os lo digo yo que llevo 300.000 cremas a mis espaldas. - ¿Algún truco especial?
Sustituir la patata por un puñado de arroz: le da una textura estupenda. - ¿Cómo congelan estas cremas?
Aceptable. Las que llevan patata en sus ingredientes algo peor, respecto a textura. Para adecentar un poco la crema que hemos sacado del congelador, donde nos encontraremos los líquidos y los sólidos por separado, es importante calentarla en un cazo y darle vueltas con unas varillas con cierta energía hasta que los ingredientes se vayan integrando.
- ¿Cómo darle un punto más cremoso?
Añadiéndole un poco de queso para untar tipo philadelfia, cuando estamos triturando los ingredientes. - ¿Pasapurés o batidora?
Si se puede, pasapurés: no metes aire a la crema y queda estupenda. Pero no siempre está uno para estos negocios, y tampoco es que nos vayan a juzgar de un crimen contra la gastronomía por meter la minipimer. - ¿Qué hay que hacer para que una crema de calabacín no amargue?
Muchas veces, cuando los calabacines son muy grandes, la crema tiene tendencia a amargar. Para evitar esto hay que pelarlos bien, quitar los extremos generosamente y no utilizar la zona central de las pepitas.
Te dejo otras cremas que sirven para todo y que te vendrán muy bien para los días posteriores a las fiestas.