Merluza rebozada con fritada de pimientos
¿Dónde vas con esas prisas, cargado con tanta bolsa del súper, el coche en doble fila y pasando a comprar algo de última hora a un chino? Reivindico con esta receta el placer de ir al mercado. A todos los que nos gusta la cocina normalmente disfrutamos haciendo la compra. Conforme vamos comprando hacemos mentalmente nuestros planes culinarios y anticipando el momento en que te vas a poner a guisar. Pero no siempre tenemos el tiempo para disfrutar comprando, vivimos a toda velocidad, compramos en el híper donde no conoces a nadie y todo está empaquetado. ¡Rápido, rápido! ¡Hay mucha cola en las cajas…! No. Yo me negué hace un tiempo a este plan. ¡Quiero disfrutar comprando lo que voy a cocinar! Y os aseguro que no tengo un minuto libre. Con las cosas básicas de supermercado, que son casi siempre las mismas, voy rápido. Pero he dejado reservado un hueco en la tarde del viernes o la mañana del sábado para ir al mercado —si voy a primera hora no tardo tanto…— y pregunto al pescadero, hablo con el carnicero, disfruto con la fruta y la verdura y, además, he comprobado que es más barato. ¡Ya! Ya sé que no todos vivimos al lado de un mercado o del súper pequeño de barrio, y que el día a día lo vamos solucionando sobre la marcha, y en ese sentido los hipermercados son comodísimos, pero creo que es un placer intentarlo, si es posible. Esta receta de merluza rebozada con fritada de pimientos es tan básica que solo tiene eso: ingredientes de mercado.
Merluza rebozada con fritada de pimientos
Ingredientes
- 1merluza—pide al pescadero que saque los lomos— Guarda la cabeza y la raspa central para hacer otro día un fumet de pescado.
- 3pimientos rojos
- 3cebollas grandes
- Harina
- 1huevo
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación
- Lavar la merluza y secarla bien con un papel de cocina. Ponerle sal.
- Limpiar de pepitas los pimientos y partirlos en tiras finas.
- Partir la cebolla en tiras o en una juliana gruesa
- Poner aceite en la sartén, hasta que cubra el fondo, y poner a freír los pimientos y las cebollas, a fuego lento para que no se quemen. Yo pongo una tapa al principio para que sude y a los diez minutos la retiro. Pocharlo con mimo.
- Batir un huevo —bien batido— para que el rebozado quede perfecto.
- Pasar la merluza por harina y huevo y freír en abundante aceite a fuego medio.
- Dejar la merluza en un papel de cocina que absorba el exceso de aceite.
- Servir con mucho entusiasmo la merluza con la fritada, bien al lado, bien en cama, bien por encima. Da lo mismo ¡es un espectáculo!
Variaciones
- Ideal con bacalao —desalarlo bien—
- La pescadilla es un poco más barata: es otra opción.
- La fritada admite pimiento rojo y verde y un poco de tomate
- Si tenéis colesterol y no podéis abusar del huevo, pasarla solo por harina especial para fritos: está también muy rica.
- Si nuestro presupuesto en pescado es limitado, escoger una buena marca de congelado y descongelar con cuidado, secando bien el pescado para que no tenga exceso de agua. Hay mucha variedad de pescado que está fantástico aunque lo utilicemos congelado.
Sobre todo en la zona centro, el pescado fresco es magnífico, pero tiene unos precios… imposibles. En este caso no me pude resistir, y después de comer tanta legumbre, pensé… vamos a darnos un lujo de otro tipo. Los que vivís al lado del mar, igual podéis disfrutar de pescados a precios un poco más razonables.
Su