Lagunas de Cañada del Hoyo: un paraje sorprendente

Si ya me sigues en Instagram me habrás visto muchas veces por las lagunas de Cañada del Hoyo, un pueblo de la provincia de Cuenca, y es que es uno de los destinos preferidos en casa.

Las lagunas de Cañada del Hoyo

Ya te hablé de ellas cuando le dediqué una entrada a la provincia de Cuenca, pero es que además hoy le dedico esta entrada para hablar de un curioso efecto que se produjo en una de ellas el invierno pasado, y que las convirtió en un lugar más sorprendente si cabe.

El paraje está a unos 40 km de Cuenca capital. Se llega saliendo de Cuenca por la N340 para tomar la N420 a unos 5 km. A 26 km hay que desviarse por la CUV 9142 a la izquierda. Hay que atravesar el pueblo y seguir adelante unos 4 km más.

El complejo se compone de siete lagunas, y el paseo para ir de una a otra es de lo más agradable, entre pinos. Hace muchos años, cuando éramos pequeños, nos podíamos bañar… ¡qué recuerdos…! Desde que fue declarado Monumento Natural el baño está prohibido. Ya te comenté algo acerca de la coloración de la laguna de la Gitana —la primera que verás una vez aparcado el coche—. Durante una semana al año aproximadamente, y normalmente a finales de julio, pasa del color azul verdoso a un azul blanquecino, por efecto de una reacción química causada por la mayor producción del fitoplancton durante el verano.

El fenómeno de la coloración

Y si esta coloración es curiosa, la ocurrida en el mes de noviembre de 2018 aún lo fue más. La que ves en la foto es la laguna de las Tortugas, que pasó de su habitual tono verdoso a un tono rosa, y no fruto de un vertido. Los expertos comprobaron que la coloración se debió a un proceso químico producido por microorganismos. Joaquín Cuadrado, director provincial de Agricultura, explicaba en Las Noticias de Cuenca que se trató de un “fenómeno de especial singularidad”, y así mismo explicaba que no lo tenían documentado antes en estas lagunas, si bien existían dos precedentes, uno en la propia Cuenca —en 2015 el agua se volvió rosa en dos lagunas del complejo lagunar de Ballesteros, en Villar de Olalla— y otro en Gerona —en la laguna Cisó, en Bañolas—.

Actualmente la encontrarás de su color original, pero te aseguro que merece la pena que te acerques a conocerlas porque el entorno es fantástico.

Espero que disfrutes del vídeo desde el #dronwebos.

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