Mojicones
Esta es una receta de las que mi marido tiene asociada a su infancia, ya que su madre le compraba en la pastelería Casa Lerma de Cuenca, al lado de donde vivían, mojicones para desayunar. Son de muy fácil realización y quedan tal cual veis en la foto: hermosos y contundentes. Suben por igual y en ese sentido no hay el menor problema. La receta está inspirada en una de la Academia de la Cocina Española, con los cambios oportunos para conseguir el sabor que buscaba. ¡Y qué difícil es lograr plasmar un sabor de la infancia que tenemos idealizado! Me pasa a mí con las tortas de manteca…
Mojicones
unidades
Ingredientes
- 250gde harina
- 6huevos
- 180gde azúcar
- Ralladura de la cáscara de medio limón
- 3cucharadas soperas de agua.
- 75gde mantequilla derretida
- 1cucharada de levadura Royal
- Azúcar glas
Preparación
- Poner en un bol 4 huevos enteros y dos yemas. Las dos claras que sobran se pueden congelar para aprovecharlas en otra cosa.
- Añadir el azúcar, la ralladura de limón, y batir con unas varillas hasta conseguir una crema espumosa.
- Añadir a esta mezcla tres cucharadas de agua y la harina mezclada con la levadura, e incorporar la mantequilla derretida. Remover hasta conseguir una masa homogénea.
- Engrasar unas flaneras y ponerles unas tiras de papel de hornear en forma de cruz para que el desmolde sea perfecto y no cueste nada. Se llenan hasta los ¾ partes de su capacidad.
- Precalentar el horno a 180°, calor arriba y abajo. Meter las flaneras y mantenerlas unos 25 minutos, vigilando sin abrir el horno hasta que estén hechos.
- Dejar enfriar un rato sobre una rejilla, desmoldar y espolvorear con azúcar glas.
Espero que os animéis a probarlos, aunque más finamente que como propone Mc: él dice que para saber si un mojicón es tal, hay que meterlo en la taza, y al sacarlo de nuevo tras breves instantes, la taza debe aparecer seca. Entonces, y sólo entonces, se puede comer el mojicón… ¡Ni he querido preguntarle cómo se come, una vez llegados a este punto!
Su de la Mancha