Tartaleta de alcachofas y papada
Sabéis de mi predilección por este tipo de tartaletas con diferentes avíos, y que todas las combinaciones me entusiasman, pero por esta tengo verdadera debilidad. También es de sobra conocido mi amor alcachofil, por no hablar de mi ingrediente estrella, que es la papada. Pues juntos en esta tartaleta de alcachofas y papada, a mi parecer, son un bocado ex-qui-si-to.
Tartaleta de alcachofas y papada
Ingredients
- 1lámina de hojaldre o de masa quebrada
- 6alcachofas naturales prietasde buena calidad
- 250gUn trozo de papada
- 3huevos
- 200mLde nata para cocinar
- Un poco de sal
- Un poco de pimienta
- 1cucharadade aceite de oliva
Preparación
- Precalentar el horno a 200˚
- Engrasar los moldes que vayamos a utilizar
- Extender la masa en los moldes, poniendo especial cuidado en colocar bien las esquinas. Pinchar la masa con un tenedor. Pasar un rodillo por encima para que queden bien terminadas.
- Poner un papel de horno encima de la masa y algo de peso, bien sean bolas de cerámica o garbanzos, y meter unos 12 minutos en el horno. Sacar y quitar el peso y el papel.
- Mientras están horneándose las tartaletas, pelar las alcachofas hasta dejar la parte más tierna, y partirlas en 8 trozos. Partir la papada en tiras y a su vez en daditos.
- En una sartén antiadherente con una cucharada de aceite, y a fuego medio pasar los corazones de alcachofa durante 5 minutos, para que cojan el punto rico, y se terminen luego de hacer en el horno. En la misma sartén, una vez sacadas las alcachofas, pasar la papada hasta que esté hecha, y dejar escurrir en un papel de cocina.
- Batir en un bol los huevos y la nata. Echar una pizca de pimienta y poner dentro las alcachofas y la papada escurridas. Repartir el contenido en las tartaletas prehorneadas.
- Poner en el horno otros 15 minutos, con calor arriba y abajo, hasta que empiece a cuajar la nata y los huevos. Es mejor que no se nos pase de tiempo, ya que al enfriar cuaja un poco más.
- Servir templado.
No hay truco, ni recomendación: unos buenos ingredientes, y es un plato tan agradecido, que para una cena de amigos, acompañado de otros aperitivos, con un buen vino y un postre que no os dé mucho que hacer, os supondrá tenerlos todos los viernes a cenar… ¡Uy! ¡Igual todos, todos, todos los viernes no os interesa! Vosotros veréis…
Su de la Mancha
Condesa del Torreznillo