Gamonéu del Puertu con mousse de avellana para Thermomix
Gamonéu del Puertu con mousse de avellana para Thermomix
Ingredientes
- Una cuña de queso Gamonéu del Puertu
- 150gde avellanas—el peso es ya de avellana pelada—
- Un tetra-brick pequeño de nata para montar
- 3cucharaditasde azúcar
- 2cucharadasde leche entera
- 3hojas de gelatina
Preparación
- Montar la nata fría a velocidad 3 vigilando el proceso. Sacar y reservar en el frigorífico.
- Poner la gelatina en remojo con agua fría.
- Pelar las avellanas y pasarlas por al sartén unos minutos para poder quitar su piel, moviéndolas y vigilando que no se tuesten demasiado.
- Poner en el vaso de la Thermomix, y pulverizar poniéndolas unos segundos a velocidad máxima y pulsando tres veces el turbo.
- Añadir el azúcar y las dos cucharadas de leche, y poner 4 minutos a velocidad 3 y temperatura 100˚. Añadir la gelatina bien escurrida y mezclar unos segundos a velocidad 3. Dejar que enfríe un poco.
- Cuando ya esté fría incorporar a esta pasta de avellana la nata montada, haciéndolo con movimientos envolventes —yo me ayudo de unas varillas—.
La presentación
A continuación se me ocurrió hacer dos lágrimas de avellana de diferentes alturas y se lo comenté a mi McGiver particular. Yo le doy la idea y él se pone a buscar el material con el que hacer el invento —ya sabéis de mi economía en moldes, y de su habilidad para todo—. Me fabricó unas lágrimas con un tetra-brick de leche en un plis-plas. Os pongo la foto porque os puede hacer gracia ver los inventos de casa.
Las rellené con una cuchara, y las metí al congelador un cuarto de hora, para que cogieran cuerpo. Se desmoldaron fenomenal, y las servimos como un semi-frio en contraste con el queso, que debe de estar a temperatura ambiente —esto es fundamental—. Adorné con una ramita de albahaca.
De esta receta destacaría que despierta todos los sentidos: por su color, por su olor, y por su sabor.
Quiero aprovechar para mandar desde aquí un beso muy especial a mis amigas cocineras asturianas Nieves y Cova, por hacernos llegar desde su tierra tantas recetas magníficas. Y a la que considero mi familia y amigos asturianos, las gracias por el cariño y la generosidad que nos demuestran siempre, y por ese amor a su tierra tan contagioso y tan vivido. Me presta.