Tostas de tomate y bonito
Hoy esta cocina os invita a un sencillo aperitivo, así que vosotros poned las cañas y para los niños refrescos, que las tostas hoy, corren de nuestra cuenta.Y además, quién no ponga en casa unos aperitivos sencillísimos es porque no quiere, no porque no sepa. Es cierto que para la repostería igual hay que tener un poco más de maña, o para solventar un segundo plato, pero para unos aperitivos hay soluciones estupendas para los principiantes. De hecho poniendo buenos ingredientes poco más hay que hacer.
Tostas de tomate y bonito
unidades
Ingredientes
- 1lata de migas de bonito en aceite de oliva
- 2tomates grandes
- 1cucharadade aceite de oliva virgen extra
- 1bote de aceitunas sin hueso de buena calidad
- ¼de cebolleta fresca
- Pan
Preparación
- Precalentar el horno a 180º, calor arriba y abajo.
- Cortar unas rebanadas de una buena barra de pan en diagonal, para que nos queden más hermosas.
- Colocar las rebanadas extendidas sobre una bandeja y meter al horno entre 5 y 8 minutos, hasta que veamos que el pan está ligeramente dorado. ¡Ojo! Cuando esté dorado por un lado, darle la vuelta a ver como está la otra cara: si no está dorada dejarla un par de minutos.
- Pelar los tomates y rallarlos con un rallador grueso, o trocearlo en trozos pequeños.
- Escurrir las migas de bonito y cortar las aceitunas en trozos. Trocear un poco de cebolleta fresca si os gusta.
- Montar el tomate rallado encima del pan, y poner encima las migas, coronando con las aceitunas y la cebolleta.
- Ponemos unas gotas de aceite de oliva virgen extra por encima para potenciar el sabor, o si os gusta más, el propio aceite de las migas si es de una marca que os da un producto de confianza.
- No hace falta sal, pero eso al gusto.
Consejos
- ¿Hay algún truco para que quede perfecto?
El único truco es tostar el pan de manera uniforme, y prepararlo con poca antelación para que el tomate no nos reblandezca el pan. Para esto la mejor manera es, como os he comentado en la receta, tostar el pan en el horno, porque se hace de una manera uniforme, por un lado y por otro. Luego es sólo sacarlo, y en cuanto esté frio, poner el tomate, la ventresca y servir. ¡Ojo! Que no se os queme por los bordes, que estropearíais el entrante, porque amargaría. - ¿Alguna otra sugerencia?
Podéis mezclar en un bol las migas con un poco de mayonesa casera y las aceitunas cortadas en trocitos, y remover. Lo ponéis encima del pan tostado y adornáis con unos tomates cherry.
Viva la simplicidad, o si no, ¿por qué nos tiramos todos a por el plato de jamón en cuanto nos lo ponen?
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