Sardinas frescué
Antes de comenzar con este plato de sardinas frescué:
Desde Santurce a Bilbao
vengo por toda la orilla,
con la saya remangada
vengo por toda la orilla,
con la saya remangada
luciendo las pantorrillas.
Vengo deprisa y corriendo,
aunque me oprime el corsé.
Voy gritando por las calles:
¿quién compra? ¡Sardinas frescué!
Mis sardinitas, qué ricas son,
son de la Alcarria, las traigo yo…
Y como las sardinas de Bilbao nacen donde quieren, éstas son de Málaga, porque esta receta me la mandó mi prima Lourdes, y nunca le podré estar lo suficientemente agradecida, porque ya que no puedo hacer espetos en casa, ésta es la manera de comer sardinas más rica que hemos comido.¿Ventajas? La cocina apenas coge olor, ya que se asan en el horno, quedan jugosísimas, y el contraste con el salmorejo es de lo mejor que he probado.
A mí, que soy muy de sardina, me cuesta muchas veces comprarla por el tema del olor tan penetrante que se queda en la cocina, así que con esta receta estoy encantada.En mi pescadería me ofrecieron dos tipos de sardinas: la más grande, ideal para asar, que quizás a este plato le vaya mejor, y la parrocha, más mediana, pero por la que tengo predilección, por su sabor extraordinario. Estaban duras, brillantes, estupendas: y a 3,90€/kg.El salmorejo con que las acompaño, no es un salmorejo al uso, ya que es más una crema fría de tomate con una moderada cantidad de pimiento rojo. Tiene que quedar espeso y muy frío.Trotamundos, esto tú lo bordas. ¿Eh?
Sardines frescué
personas
Ingredientes
- 1kgde sardinas
- Sal marina en escamas
- Limón
- Una gotas de aceite de oliva para las sardinas
- 2tomates grandes rojos y de buen sabor
- Un poco de cebolleta fresca
- Una tira grande de un pimiento rojo que esté muy terso
- Sal
- Un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Un punto de vinagre de Jerez
Preparación
- Pelar los tomates, escaldándolos unos segundos en agua hirviendo y pasándolos a continuación a agua fria. La piel sale prácticamente sola. Escurrir el agua del tomate para que nos quede espeso.
- Poner en el vaso de la batidora, echar la cebolleta y el pimiento. Batir enérgicamente. Cuando esté bien triturado añadir el aceite de oliva virgen extra, el vinagre al gusto y la sal. Meter en el frigorífico. Tiene que estar bien frío.
- Limpiar las sardinas quitándole las tripas, la cabeza y la raspa central, dejando solo los lomos.
- Precalentar el horno a 220° —va a ser un momento, no os dé sofoco—
- En la bandeja del horno, poner una lámina de papel apto para horno. Colocar las sardinas encima, unas gotas de limón en cada sardina, y un poco de sal. Añadir un pelín de aceite de oliva encima de cada lomo. Taparlas con un papel de aluminio para que no se resequen.
- Meterlas al horno y en unos 8 minutos están listas: quedan hechas y super jugosas.
Montaje del plato
- Poner el salmorejo en un plato, extendiéndolo bien, moviendo el plato hacia todos los lados.
- Poner los lomos recién sacados del horno encima.
- Adornar con un poco de limón y perejil, o al gusto.
¡Sardinas frescué…!