Crónica de la firma del libro de webos fritos: Madrid, 28 de Mayo, por la mañana

Sabéis de sobra con qué cariño esperamos estos momentos. Os lo digo, y no me canso de repetirlo: es un momento muy especial, poneros cara y poder compartir unos minutos con cada uno de vosotros. ¿Cómo podríamos agradeceros que os organicéis, cojáis a vuestra familia o a vuestros amigos, y os plantéis donde estemos para poder conocernos?

Prometía buen tiempo, pero mirábamos al cielo porque llevábamos muchos días con tormenta. No llovió, hizo mucho calor. Yo estaba sufriendo por los amigos que estaban esperando al solete, pero con buen humor todo se lleva, y nadie se quejó.

Os dejo con un montón de historias y de amigos. Los que sois lectores habituales de blogs gastronómicos vais a poner cara a muchos compañeros, a mis amigos y familia. Y empiezo con la intensidad que merece la ocasión.

Madrid. Parque del Retiro. Caseta 229, de nuestros editores, Ciudadela Libros. 12:00 horas.

• La primera amiga que llegó fue Morgana. Muchos la conocéis por sus tartas tan alucinantes, pero además en su Tartienda es donde yo compro siempre mis moldes de muffins, cakes y magdalenas. Por precio y por novedad, me entusiasma, y agradecí mucho que estuviera con nosotros. Hablamos de sus últimas adquisiciones y del éxito de sus moldes azules de lunares que aparecen en el libro.
• Ramón J. Soria es amigo, pero además es mi escritor favorito: no se pueden contar las cosas mejor. Os he hablado en alguna ocasión de él. Visitar su blog es obligado para los que nos gusta la literatura y la gastronomía. Pensé que no iba a venir a vernos con sus hijos; él sólo está feliz en su medio natural: el río y sus truchas. Pero sí, nos pudimos abrazar, y aunque nos supo a poco, fue muy intenso. Tengo en mi escritorio, para que nunca se me olviden, unas palabras suyas:
  

  Nunca he sido más feliz que aprovechando la morralla del tiempo, esos instantes extraños, con espinas, que se esconden en las rocas de la orilla, que tiramos por la borda sin saber que su sabor es intenso y delicioso. Quiero saborearlos contigo porque todo en el mar es comestible, todo en la vida precioso.Y quién no lo sepa no merece comer pescado.

• Le tocó el turno a Alicia. Con ella me manejo muy bien por el Facebook. Me encantó poder saludarla y charlar un ratito.
• Mari no pudo venir porque trabajaba, y mando a su hija Karina con un mensaje de ánimo para seguir en la brecha. ¡Gracias, Mari, de corazón! Tu hija estuvo cariñosísima, me emocioné mucho.
• Pude conocer por fin a una compañera de Twitter, Elena, que trabaja de madrugada y me saluda todas las mañanas a las 6 con un ‘¡Buenos días, Su!’ que me sabe a gloria. Pudo ir con su minichef Nicolás, y su marido, Nicolás también, y pasamos un rato estupendo.
• Le tocó el turno a Justina, que se autodenomina webofan. Estuvimos riéndonos a costa de esto. ¡Qué estupendo momento!
• A Alegría tuve la ocasión de conocerla en un encuentro del pan que tuvimos hace unos meses. Entonces el libro no era ni proyecto, y ella me dijo: ‘A ver cuando nos sorprendes con un libro’. Así que estuvimos alabando su ojo clínico.
• ¿Quién no conoce Acibecheria? Es el blog de mi querida amiga Marga, con un gusto extraordinario para todos sus platos, y sí, puedo decir que la reina de las sobras y del reciclaje. A mi entender, nadie en la blogosfera como ella para hacer un plato de seis tenedores con cuatro restos de frigorífico. Fue un placer, pero muuuuu corto.
• Tengo un cariño especial a nuestro amigo Carlos Noceda y a su familia. Gran compañero, estupendo cocinero y fabuloso fotógrafo. Sus hijos son una preciosidad y estuve metiéndome un poco con él, diciéndole a Carmen, su mujer, que no le dejase escaparse a tanto evento. Nos reímos un rato.
• Julian e Isabel vinieron mandados por su hijo Carlos, un cocinilla auténtico. Nos une Cuenca y estuvimos charlando de zarajos y morteruelos, y del resto de la familia.
• Hay una persona muy cariñosa y pendiente de estos webos en Facebook, y es Sole Ripoll. Vino con su marido José Antonio, con ganas de que le dedicáramos el libro a su hija María del Mar. Sole y su marido son entrañables. A ella le dije lo que me admiraba de lo bien que se manejaba con las nuevas tecnologías…
• Cecilia vino porque su amiga Teresa, muy amiga de nuestro amigo común Carlos Dube, no lo pudo hacer. Fue un placer: la buena comida nos une a todos.
• Hace años, muchos años, en una de las visitas de mi padre al Hospital de Cuenca, coindimos con un compañero de habitación como nunca hemos tenido —y mira que llevamos unos cuantos—, con una calidad humana excepcional él, su mujer y toda la familia. Despues de tropecientos años, la amistad sigue, y yo con su hija Mariví, tengo un nosequé muy especial desde siempre. Pues se plantó en la caseta para que le firmara cinco libros, para ella, para su madre, para su hermana, para una amiga común Susana, y para otra amiga de Cuenca.
• ¿Qué se puede decir de una amiga catalana, MGlòria, que se presenta en Madrid a pasar el fin de semana con las amigas, y lo primero que piensa es venir a vernos al Retiro con su pedazo de cámara nueva, aconsejada por Mc? Además de tener un blog maravilloso, es una persona con una sensibilidad extraordinaria, y el poder saludarla y charlar unos minutos fue un momento inolvidable.
• Los siguientes: Alfonso, Nuria y sus hijos. Estuvimos charlando de lo que nos gustaba comer a todos. Ellos se metían los dos en la cocina a disfrutar y les apetecía hacer partícipes a sus hijos de todo esto.
• Paco y su hijo Bosco, no son amigos: para Mc y para mí es como un hermano. Ha sido su maestro en la profesión, y siempre siempre ha estado a nuestro lado. Y además ¿qué más se puede decir de un señor que te da un emocionado abrazo y un ramo de preciosas rosas blancas?
• Carlos, cocinero excepcional de él mismo, me contaba que lo que disfrutaba cocinando y comiendo. Su hijo no quería salir en webos, pero al fotógrafo no se le escapa ni una, y lo siento, pero quedaste retratado. Me hizo mucha ilusión, ya que tenemos pocos hombres weberos, eso sí… de calidad superior.
• Los que ya le conocéis por sus recetas le vais a poner cara. Yo le conozco por Rechu, o por gurú, y es el rey de los interneses. Sus magníficos recetarios están de boca en boca por todo el mundo mundial, y no sé a que esperáis para descargarlos. Hasta ahora, siempre que nos veíamos, su chica, Jimena, no podía acompañarle y siempre estábamos en Twitter con el cachondeo en forma de hashtag de #jimenanoexiste, pero sí, sí existe, además de ser una persona que nos ayuda a todos los blogueros empleando a fondo con nosotros sus conocimientos. Es encantadora, ya le dije que no se merece al gamberro de su cocinero.
• Elena, abogada. Además de charlar sobre nuestras cosas gastronómicas, estuvimos hablando de lo mal que está nuestra profesión, agudizado todo por la puñetera crisis.
• El turno era ahora de Laura y Carlos. Con ellos comentamos el asunto roscón, lo bien que les sale. Su nena Nerea, todavía sin nacer, tendrá una madre que le hará sus comiditas, y eso no tiene precio.
• Al fin pude saludar en persona a Laura, Pablo y Daniel. Laura es compañera de trabajo de Mc, y trabajadora incansable de todo webos. Su niño es una esponja con todo lo que le enseña su madre, y su marido se lo zampa todo. Me encantó ponerles cara, ya que siempre que recibo un correo suyo con un logro, es una delicia para mí.
• Mc, o @srwebos, como más os guste, tiene unos compañeros de trabajo muy entregados a la causa webos. Una de ellas es May, embajadora allende los mares de webos fritos. Yo tenía muchas ganas de conocerla personalmente. Vino con sus hijas Mireia y Blanca, y sus dos nietas. Pasamos un momento estupendo, como no podía ser de otra manera.
• El siguiente es un webero especial, es Willy, el perro de Rosa Ardá. Rosa en principio no podía venir porque trabajaba, pero le cambiaron el turno y se vino con su Willy a darnos un beso. Sobre Rosa quiero decir una cosa. Velocidad Cuchara y webos fritos son dos blog con muchos lectores comunes, pero entre los blogueros gastronómicos no hay rivalidad o competencia, por lo menos yo no lo aprecio así en mi entorno. Lo que hay es compañerismo, ayuda, cariño, apoyo en cada uno de los proyectos. Su gente es la mía, y yo a mis lectores siempre les comento que su blog les puede ayudar. Cada uno tiene su estilo y su manera de hacer las cosas. Hay lectores para todos, estamos para compartir y para aprender, y esto es como todo, cuanto más y mejor, mayor el beneficio para todos. Por circustancias, hace un mes a ella le firmamos el primer libro que salió a la venta. No tenía por qué haberse molestado en venir a vernos en su único día libre. Eso demuestra cómo es. Poco más se puede decir.
• @AnaAnnieAnita, que nos sigue en Twitter, se acercó a vernos con Lucía. Quería regalarle a su hermana Elena un libro, que espero que lo haya disfrutado.
• María y Francisco, amigos chilenos que estaban en Madrid, y con los que estuvimos charlando sobre ingredientes que ellos no tenían en su país y posibles sustituciones. María prometió mandarme resultado de sus platos.
• ¡Qué contar de Irene! En la cola de espera se confesó alma descarriada y ahora su sobrina sólo quiere sus croquetas. Tuvo el detallazo de regalarle a su madre, Sagrario, el libro de webos. Sagrario: entre tu y yo estamos consiguiendo mucho con la niña, ¿eh?
• Tocaba el turno a otros amigos del trabajo de Mc. Mercedes —alma muy descarriada de la cocina y a la que librowebos está reformando—, y Jóse, su marido, —encantado, claro— que se llevaron su libro, y otro para Pilar y Pedro, cuñados suyos, que en su día tuvieron la cadena de restaurantes ‘A huevo’, así que en cierta manera estamos ‘hermanados’. Vinieron con Manme y Ramón, que junto con su hija son fans de webos. Gracias a ellos, para Mc el trabajo es más agradable, aunque protestaron al unísono reclamando no haber probado todo lo que yo pongo en el capítulo ‘Para llevar a la oficina’. Ya quedamos en que eso hay que solucionarlo.
• Juan y su mujer Lourdes se acercaron con sus hijos. Al mayor, Alvaro, le he seguido en las fotografías que su padre le ha hecho desde pequeño. Grandes comedores, y gran fotógrafo, me encantó conocer a su familia. Y lo peor, no tenemos foto: nos liamos a hablar y dimos la foto por hecha. ¡Capón para nosotros! Nos tenemos que ver de nuevo.
• Mi familia no pudo estar con nosotros, por estar en el hospital con mi padre, que está ingresado. Por eso que Maricarmen, Juanjo y Marta, padres y hermana de mi cuñado Nacho, y que como familia les sentimos, pudieran venir, fue muy especial, y no se me olvidará jamás. Gracias de corazón por arroparnos de esa manera.
• Edu y Vero, que compraron el libro para regalárselo a su amiga Rocío, no conocían webos, pero espero que disfruten con el libro y el blog.
• Elena, gran aficionada a la repostería y enganchada a magdalenas y dulces era la siguiente. Le dí las gracias por contarnos sus cosas con ese cariño.
• Enma, Nacho y Bea ya llevaban un rato al sol los pobres. ¡Lo siento, chicos! Fue un placer charlar unos minutos con ellos.
• A continuación, mi cuñado Jóse, diseñador del libro, y nuestra sobrina Carmen, que quería un libro dedicado para ella, otro para su hermano Pablo, que está en Roma, y otro para Loli, amiga de la familia. Gran parte del éxito del libro radica, en que Jóse entendió perfectamente la idea que teníamos sobre cómo nos gustaría que fuese, y supo plasmarlo a la perfección. Es un fenómeno, y además no es de los cuñaos que yo hablo en el libro, no. Yo no tengo de esos.
• No todos los días pasa que alguien se cruza en tu vida y sabes que siempre le tendrás ahí, pase lo que pase. A él y a su mujer. Eso es lo que nos ha pasado con Fernando y Rosa, que vinieron a vernos con sus mozos. Su chispa, su humor, su inteligencia, y el punto picante que le aporta su AOVE es para nosotros una inyección, por no hablar de la sonrisa perenne de su mujer. Os queremos.
• Teresa, encantada con las fotos de Mc, muy cariñosa, hablaba de la paz que encuentra con sus fotos. Me ofrecí a dejárselo una semanita, que sé yo que lo devolvería en cuanto le tuviera que dar de comer dos días. ¡Con lo que zampa…!
• Juan, fue el siguiente. Me hizo mucha ilusión conocerle, ya que comenta en webos en muchas ocasiones, dando su punto de vista y aportando, que es lo que hace falta.
• Sergio y Sonia, con su nene. Son los autores del blog Horno de luna, y con ellos estuvimos comentando la maravilla que es compartir recetas e inspirarnos entre todos de las recetas de compañeros.
• Cristina y su hijo, que ya nos pillaron casi de cierre, pero que aguantaron como campeones, hasta el final, y se pudieron llevar su libro firmado.
• Para ir acabando, daré las gracias a Alonso, de Ciudadela, que junto con Daniel atendió a mis amigos y lectores. Me consta que disfrutaron con esta firma de libros tan lejos del uso habitual de autores ‘serios’.
• Y quiero que conozcáis a mi Luisa, a la derecha, que confió en el proyecto incluso antes de que existiera, y a su hermana María, que tiene otra editorial, Veintisiete letras. Os aconsejo que le echéis un vistazo, porque edita unos libros cuidadísimos y muy interesantes. Si vais por el Retiro estos días, están en la caseta 214.

[Podéis hacer clic en cualquier foto para verla más grande]

Los que no estuvisteis allí probablemente no hayáis llegado hasta el final, pero si lo habéis hecho, habréis descubierto unas cuantas cosas: unos enlaces de lo mejor de la blogosfera, las caras de amigos que nos gusta comer bien, meternos en la cocina y disfrutarlo, pero sobre todo, tanto cariño y tanto apoyo, que no caben en las 2456 palabras que tiene este post.

Estaremos de nuevo en la Feria del Libro de Madrid, en el Retiro, el viernes 3 a las 18.00 horas en la caseta número 132, de la Librería Diálogo. ¿No vas a venir?