A mi derecha una salita. Con una mirada rápida veo una mujer de mi edad; podría ser yo misma. Ella, con la mirada clavada en el suelo. Ni el ruido de mis bolsas le hace salir de allá donde se encuentre. Su hijo mayor —podría ser mi hija Sara—, en una silla, con los pies cruzados, las manos metidas en los bolsillos de la sudadera, y mirando a su madre, y jugando con una pequeña pelota, su otro niño —algo más pequeño que mi hija Beatriz—, contento y ajeno a todo, en esa edad en que con muy pocas cosas eres feliz.
Foto: Cáritas Bizcaia
Vivo en un barrio obrero —bueno, mejor dicho, en paro— y con muchas personas mayores. Sabíamos que Cáritas estaba desde hace mucho tiempo echando una mano a cada vez más familias —y más necesitadas— dando alimentos básicos.
Por eso, hace tiempo decidimos mi madre y yo que al ir al súper compraríamos una vez al mes productos de primera necesidad, y echaríamos algún capricho menos en nuestra cesta de la compra: una pequeña ayuda real y palpable que sabíamos dónde iba. Normalmente es mi fotógrafo el que lleva a Cáritas de nuestra parroquia las bolsas con lo que sabemos que les puede venir mejor: productos no perecederos de primera necesidad. Ya me lo decía él, la cantidad de familias que estaban esperando esa pequeña ayuda… Pero ayer no pudo ir él, y fui yo.
Una de mis mejores amigas trabaja como asistente social en Cáritas en Galicia. Por ella sé un montón de vivencias y de situaciones, sé como funcionan sus comedores sociales, y las ayudas que ofrecen a los verdaderos necesitados. Es su trabajo, lo sé, pero es que además es admirable, porque sigue ejerciendo después de su horario con la misma entrega con que lo hace en su jornada laboral. No se me olvidará nunca la imagen de ella repartiendo con su pequeño coche un excedente de un producto que no se iba a vender entre gente que lo necesitaba.
A lo que voy: una cosa es saberlo, conocer la situación real de muchas familias, leer las noticias en los periódicos sobre un montón de familias como la tuya o la mía que tienen problemas, y otra es verlo con tus propios ojos: esa mujer sentada, con la mirada perdida… Podría ser yo misma, la que por circunstancias de la vida me viera en esa silla, no pensando en cómo organizo los menús de la semana o qué pongo en mi túper, sino pensando qué les pongo para cenar a la noche a los míos cuando no se tiene nada.
Sabéis que no soy de charlas político-morales-religiosas; cada uno somos mayorcitos para tener nuestro propio criterio, y yo no soy nadie para ello, ni éste es lugar —bueno, quizás lo que si hago es achucharos para que vayáis al mercado y os metáis en la cocina—, pero no puedo dejar pasar la oportunidad de pediros una ayuda, un gesto, si es posible, del tipo que sea, para cualquier organización que ayude en tu barrio a dar de comer a la gente a la que le haga falta.
Sé que todos vamos con prisa, con problemas, que en nuestras propias familias hay paro, pero por favor, que a nadie le falte un plato caliente.
Gracias por leerme.
Su
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yo les pongo ajos...
No me los pierdo!!!!! una cosa que tal quedan hechos el día anterior? me gustaria...
Me encanta. Aprovecho verduras de las que hay que dar salida, y luego en todo tipo...
¿Crees que se podría hacer en olla lenta? Tiene muy buena pinta esa receta!!!...
Buenisimosss...
Muchísimas gracias por tu reflexión. Es momento de hacer pensar a todos los que tengamos cerca y así seremos más granos de arena.
Muy acertado tu post. Es cierto que sabemos cómo andan las cosas, pero no está de más que nos recuerdes que con saberlo no basta, que hay que hacer algo al respecto. Gracias.
Besos manchegos
Estamos pasando del Estado del bienestar al Estado de la beneficiencia, la cuarta parte de la poblacion no tiene trabajo, montones de familias con todos los miembros en paro, los ricos son cada vez mas ricos y los pobres cada vez mas pobres, cada vez hay mayor desigualdad social y España en este caso si que esta a la cabeza de los paises europeos en desigualdad social.
La semana pasada deje un caja de leche a Caritas que estaban recogiendo a la puerta del Super. Y mi pensamiento fue el mismo que el tuyo podría ser yo. Solo la suerte hace que yo pueda estar ayudando en vez de ser ayudado y me entro miedo de cambiar de lado, por mi, por mis hijas, por mi familia, que triste tener miedo…
por desgracia esto es el pan de cada día en los tiempos de crisis que corren, me parece muy buena iniciativa colaborar, aunque sea con un poco, con la gente que ayuda a los necesitados.
Olé , olé y olé Su, esta es la manera de ayudar y de concienciar, sin radicalismos, sin política, sin violencia, sólo el corazón que empuja a entender como mi kilo de garbanzos no necesitan más intermediarios para llegar al que lo necesita, sólo mi intención .
A ver si se dan cuenta los políticos y sindicatos, que por encima de todo estamos las personas y yo no voy a consentir, hasta donde me llegue que mi vecin@ pase hambre porque, cojo un perolón y se lo llevo a su casa en cuanto lo necesite.
Gracias Su por darme la oportunidad de dar mi opinión. Un beso grande, grande..
Muy buen post, esa es la realidad que nos rodea, tal vez si fuéramos un poco más solidarios con nuestros vecinos necesitados, hasta nosotros mismos nos encontraríamos mejor. Cuando ayudas, aunque sea un poquito, que paz te inunda. Gracias por hacernos reflexionar, ahora que se acercan fechas en las que a todos nos sobra comida. Un saludo.
La solidaridad es necesaria, sin ella no podemos sentirnos humanos. Que tristeza que haya tantas personas tan necesitadas que no tengan ni para comer.
A que esperan para rescatar a los que no tienen nada que llevarse a la boca?
Cuanta miseria y cuanta injusticia.
Saludos y felicidades por tener una familia sensible a los problemas de los demás.
Será una solución en esta situación tan crítica, y doy gracias a Dios del privilegio de poder ayudar, ayudar es más fácil , es muy duro necesitar ayuda.
enhorabuena por tu entrada, todos tenemos que poner de nuestra parte para ayudar a los demás porque como esperemos que los politicos nos saquen de esta, lo llevamos claro. Dices que no es este el sitio para hablar de este tema, si lo es y deberia de hablarse más todavia en todos los ambitos para ayudar a todas las personas que lo están pasando mal, porque además no sabemos quienes vamos a ser los próximos.
un besazo
Gracias a ti y a caritas por la labor que hacen.Me voy a unir tambien a la propuesta
Felicidades por este post, simepre hay que estar del lado de los que mas lo necesitan. Y lo mas importante valorar lo todo lo que tenemos cada dia por insignificante que sea. Gracias.
cuantisima razon su, como siempre.
nada mas q añadir, solo q d mañana no pasa
cuidat mucho, me gusta seguirt y mas cuando pones el corazon, como hoy.
Te admiramos Su… pero hoy todavia mas si cave!!! UN ABRAZO
Emocionante entrada, cualquiera con la que esta cayendo podemos necesitar ayuda, y ahora que de momento aún podemos ayudar hay que hacerlo. Yo sólo aporto con algunos alimentos en recogidas. Pero si debemos dar un poco más de nosotros. Cada vez tenemos más desigualda social :(
Gracias Susana por esta entrada,me ha emocionado.Yo cada dia veo familias como van en declive,ademas se palpa en el ambiente,en la calle,en el super,en las caras de preocupación de la gente….Debemos de colaborar todos cada uno dentro de nuestras posibilidades,ojala esta situación termine pronto….!!!
Su: Aunque puedas pensar que no es el lugar o no eres la indicada, creo que tu blog es un medio perfecto para dar a conocer la situación precaria en la que se encuentran muchos de nuestros conciudadanos y las iniciativas para intentar paliarla. Y creo que lo es precisamente porque es muy seguido y por tanto, tu mensaje puede llegar a muchas personas.
Nunca me hubiera imaginado que en nuestro país volverían a darse situaciones como las que vivieron nuestros padres y abuelos en épocas pretéritas y que tantas veces nos han contado.
Es penoso e indignante que a mayores necesidades, más recortes por parte de los políticos, por ello creo que, en la medida de nuestras posibilidades, es necesario dar nuestro apoyo a todas aquéllas iniciativas que contribuyan a aliviar las necesidades de quienes lo están pasando verdaderamente mal.
Su, una gran lección en tu post. Caritas hace un gran trabajo. A ver si todos aprendemos un poco más. Petons
Ellos, ese ente indefinido que se esconde tras el pronombre, no son ellos. Somos nosotros. Todos. Los que ya no tienen nada y los que aún tenemos. El paro está carcomiendo nuestra sociedad plácida, hasta hace poco llena de comodidades. El hambre, la necesidad de cubrir el día a día, empiezan a hacerse fuertes entre las familias. Ayudar está en nuestras manos. Un poco, un algo.
Es una entrada estupenda. Esto tiene que tener cabida en cualquier blog. Cualquiera nos podemos ver en esa situación tan cercana. Ya no son uno ni dos los casos de extrema necesidad, viven al lado nuestro y la situación de este país va a peor.
Tienes toda la razón cualquiera podríamos ser esa mujer, así que yo por mi parte tratare de ayudar en lo q pueda.
Muchas gracias Su.
Genial Su. Las pasadas navidades, haciendo una gran compra en un súper, había un par de monjas a la salida del mismo solicitando ayuda para una residencia de ancianos. Hablé con ellas y es encomiable su labor. Es cierto que todos podemos ser esa familia que atraviese momentos difíciles.
Aportaremos nuestro granito, sin lugar a dudas Su. Un beso enorme como siempre
Gracias a ti por este post tan necesario, sabiendo que llegas a tanta gente, en mi pequeña ciudada, en las ollas populares que organizamos algunos domingos, las cosas son cada vez más largas, y las miradas cada vez más tristes.
Gracias Su y Cía, sois increíbles.
las colas, quería decir las colas, jajajaa, las cosas están cada vez más difíciles para mucha gente, en los barrios y pequeñas ciudades obreras.
Muy bueno el S.O.S me uno a todos los comentarios. Muchas gracias.
Muy grande, Su, como siempre. Tus recetas son magníficas pero cuando escribes sobre otros temas, siempre lo haces de forma sensible y muy atinada, y dejando a un lado cualquier ideología. Enhorabuena y gracias darnos un meneo de vez en cuando en tu blog.
Hay muchas cosas que podemos hacer todos a nuestro nivel. Que vaya por delante que yo no soy católica practicante, pero en la parroquia de mi pueblo (26 habitantes) se ha creado un banco de alimentos. Una vez al mes se hace la recojida. Se piden alimentos, jabón… y el dinero lo gestiona directamente la parroquia con las empresas de luz, agua…
En las fiestas del pueblo de al lado, se organizó un concierto, la entrada era libre pero se pedía aportaciones de alimentos para dar a un comedor social. Un éxito increíble. Creo que sólo hay que tener ganas e imaginación.
Gracias por tu blog, pero la entrada de hoy ha sido muy necesaria, se nos olvida, a veces, la necesidad que tenemos de ayudar a los demás. GRACIAS¡¡¡¡
Qué sería de este país sin Cáritas… Un abrazo.
Su!!
Esta “receta” que nos hoy muestras la tenemos que hacer todos. Y no solo una vez, sino que debemos repetirla tantas veces como nos sea posible.
Gracias Su por ser tan auténtica, sincera y buena persona. Y los demás, ya sabéis, a movernos!
Anna
Susana, siempre me encantan tus posts, recomiendo a todo el mundo tu página.. pero hoy, sin duda, has escrito tu mejor post.
Gracias por este aldabonazo.
Yo he empezado a colaborar, a través de una amiga, con un comedor social de una parroquia edl centro de mi ciudad y se me encoge el corazón al ver ese “puedo ser yo”; un golpe de suerte, de mala suerte, y estamos al otro lado así que seamos conscientes de lo que la vida nos brinda y compartamos con los demás.
Un abrazo fuerte, gracias y enhorabuena de nuevo,
Paloma
Gracias por la mejor de las recetas! La de la solidaridad. Dirijo un colegio con comedor escolar, que en los últimos dos años casi se había convertido en un comedor social infantil ya que la mayoría de los usuarios eran alumnos becados (más de un 80%). Este curso comenzamos con la enorme tristeza por saber que las becas de comedor escolar han desaparecido. No sabes la de situaciones que he tenido que vivir… ya no hablamos de educación, de no poder comprar libros o material escolar, sino de no cubrir necesidades básicas. En medio de un panorama bastante negro, te aseguro que no me he resignado y he llamado a muuuuchas puertas, de repente una llamada nos ha devuelto la esperanza gracias a la SOLIDARIDAD CON MAYÚSCULAS de ALDEAS INFANTILES CUENCA. Han donado 27 becas de comedor escolar para los alumnos de nuestro centro de las familias más desfavorecidas. Los niños han comenzado esta semana y algunos de ellos al mismo tiempo han comenzado el curso ya que no venían a clase y la comida les ha hecho venir.
Dentro de esta marea de solidaridad que encabezas, me gustaría si alguien lee esto pedir la colaboración en ONGS como ésta que dirige sus campañas directamente a la infancia más necesitada. De nuevo muchas gracias Su.
Hola Su
Te sigo desde hace ya un tiempo y esta es la primera vez que me decido a escribirte ya que a pesar de que me gustan mucho tus recetas y consejos no creo estar a tu altura. Pero hoy al leer tu SOS veo que hay que darte las gracias por ser como eres, gracias por compartir siempre todas tus cosas con todos, gracias por enseñar que la gratuidad es un don que hay que compartir, gracias por que si todos ponemos un granito de arena aunque sea muy pequeño, entre todos consigueremos que ese granito de arena sea una montaña. Gracias de nuevo y un abrazo para toda tu familiar
Te puedes imaginar como ando últimamente de tiempo, de ánimo y de todo. Pero no podia dejar pasar este post sin comentar. La realidad está ahí, hay muchas personas pasándolo muy mal, sí, quizá algunos por su mala cabeza, pero muchos, la mayoria, porque sus vidas se han dado la vuelta como un calcetín,víctimas de la situación, sé de lo que hablo, y hay que ayudar, cada uno como pueda, pero como dices, que nadie se quede sin comer. Y como han comentado muchos, está claro que la solidaridad y la ayuda de las personas normales, ni políticos, ni sindicatos, ni leches, somos las que podemos hacer algo para mitigar esta situación. Un abrazo muy fuerte Su, que muchas veces hay que despertar nuestras conciencias aletargadas y lo has hecho muy bien. Esperanza.
Desgraciadamente, Su, la realidad supera a la ficción y hoy, la imagen de las manos con la comida en una plato de plástico va siendo cada vez más habitual. Con ella nos enfrentamos a una realidad. Y hoy es esa mujer con sus dos hijos y mañana podemos ser uno de nosotros. En el cole de mi hijo, todos los años hacemos una semana solidaria. Desde hace tres años unos cuantos padres nos metemos a hacer un rastrillo: pedimos en las tiendas ropa, complementos, etc; a empresas, ayuda en forma de cortes de pelo en las peluquerías, cenas, en restaurantes… Es una locura pero cada años hemos logrado entre 8.000 y 10.000 euros. El primer año todo el dinero iba a un proyecto del cole en Venezuela pero desde hace dos hemos pensado que tenemos más necesidades cerca de nosotros que cruzando el charco. Así que la mitad del dinero la destinamos a hacer unos carros de comida para unas cuantas familias. Esto me da pie a pedirte para el siguiente mercadillo en marzo que, si te apetece, nos dones un par de ejemplares de tus libros para venderlos allí. ¿Mucho morro el mío? Sólo si puedes, eh? Enhorabuena por este post. Es bueno remover conciencias y darnos cuenta de lo privilegiados que aún somos a pesar de que algunos nos hayamos quedado sin trabajo.
Ojalá pudiera…pero está agotado, algo se me ocurrirá
Yo también vivo en un barrio obrero. En mi parroquia el grupo de Cáritas no llega para cubrir las necesidades de las personas que se acercan. Antes les llevaba comida, ahora les ayudo con dinero para que compren aquello que consideren necesario, y todo vale desde el paquete de lentejas al euro que pueda dejarse en una improvisada caja con un agujero que han colocado en la iglesia a modo de hucha, eso sí, bien grande pone Cáritas.
Ahora cuando vamos a misa, lo único que se me ocurre es dar gracias por que todos estamos sanos y no nos falta que comer, que no es poco.
Espero que tus palabras no caigan en saco roto, a todos nos llegan, pero ¿cuántos se van a mover de verdad?
Dentro de nada Navidad y sólo pensaremos en los regalos y las comidas de las fiestas, a lo mejor también podríamos ser conscientes de que para muchos, sobre todo niños, estas navidades serán muy, muy tristes.
Besos.
Alicia.
Contigo
Y no cuesta tanto la verdad. Hay que mover las conciencias. Besos
Muy buena entrada.
A ver si con un granito de cada uno ayudamos a los que están más necesitados (ya que a los de arriba no se les ve muy competentes o puede que sí lo sean, pero en otras cosas que parece que les interesa más que las necesidades del pueblo).
Su,
Te leo desde hace mucho tiempo y creo que nunca he sentido la necesidad de escribir más que hoy. Tengo tres hijos pequeños, entre cuatro años y seis meses, y pensar en que algún día les faltara un plato de comida me hace llorar literalmente.
Gracias por recordarnos que todos podríamos ser esa mujer. Hay que ponerse manos a la obra!
Un beso enorme
Raquel
Chica,paso este post a todos mis contactos.Gracias de nuevo por hacernos más concientes de la situación que vivimos.
Hace muy poquitos días q te sigo. Buscando una receta de magdalenas encontré tu blog y … Genial!! Estoy enganchada a tu blog y después de leer esta entrada aún lo voy a seguir más. Ya no sólo es comida también es corazón.
Trabajo con niños de un nivel socio cultural medio a bajo y los he visto recoger un gajo de mandarina del suelo de otro niño para comérselo. Es necesario concienciarnos y ayudarnos unos a otros. Gracias!!!!
una buena iniciativa,que acompañada de otras por parte del gobierno serian algo que nos haria invencibles.gracias por intentarlo y animo a todos a colaborar.
A mi esto me da ganas de llorar cada vez más. Las situaciones que estamos “viendo” son muuy fuertes!!! Cuando lo vea en los periódicos te da pena pero no te parece cercano, por decirlo de alguna manera, pero cuando lo ves con tus propios ojos, como tú dices…da impotencia y ganas de llorar!
He tenido algunas vivencias últimamente de las que he llegado a casa (yo que tengo) con un nudo en el corazón taaan grande!!!
No es justo lo que está pasando y que haya economías tan dispares entre los ciudadanos del mundo, no es justo, joder! (perdón, pero me altero). Nosotros hacemos lo que podemos dentro de nuestras posibilidades, pero seguro que entre todos podemos hacer más y mejor!
Gracias Su por empujar un poquito a ser más solidarios, ojalá termine esto ya! ♥♥♥
gracias por ser como eres
No soy de las que me gusta enviar comemtarios,sigo esta pagina a diario, me encanta,pero el tema de caritas quita el sueño hoy en dia,pertenzco aun grupo y si no se vive de cerca por mucho que nos imaginemos no llegamos a ver la necesidad tan grave que estan viviendo familias enteras,es poca toda la ayuda que recibamos para repartir pero mil gracias a todos por vuestra generosidad que hasta ahora no nos ha faltado para cubrir las necesidades mas básica,un abrazo
Me parece estupendo que se fomente la solidaridad a través de cualquier medio y plataforma. Todods juntos somos más. Yo también soy asistente social. Gracias por tu gesto!!
su eres genial, genial, genial………..
Había preparado una comentario tremendo comentando nuestra experiencia en lo que se refiere a la ayuda y cuando le di a publicar, me dio erro.
Así que simplemente voy a decir que me ha parecido una iniciativa preciosa la de tu entrada. ¡Muchas gracias por llegar al corazón!
Estamos viviendo momentos muy difíciles y la concienciación ciudadana es muy importante, así como la participación y ayuda.
¡Feliz fin de semana!
Besos.
Todos podríamos estar ahí… con la mirada perdida, sin saber cómo alimentar a nuestra familia. Por desgracia es una realidad.